Rastree lo que estaba escondido y disfruté jugando con eso.
Jugando con ella.
Funcionó de mil maravillas.
Hasta que dejó de hacerlo.
Resulta que la pequeña luchadora que encontré estaba lejos de ser lo que anhelaba.
Era diferente a todo lo que conocía y más de lo que esperaba.
Ella era luz, y yo el bastardo que la condujo a la oscuridad.
Pero esta chica... la siguió con una sonrisa.
Le dije que suelo romper cosas bonitas.
Ella me hizo prometer que la rompería.
Mil gracias a TRR!
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